En el año 2005 Pablo Cruz, Elena Fortes, Diego Luna y Gael García fundaron el festival Ambulante en México con la premisa de difundir documentales con puntos de vista independientes y novedosos sobre la realidad.
Desde entonces, Ambulante se ha expandido y demuestra que no tiene fronteras. En Colombia, la tercera versión ha estado a la altura de la programación: 5 ciudades, 80 locaciones, 50 documentales y 28 invitados nacionales e internacionales.
Más del 70% de sus eventos son gratuitos y en espacios muy diversos de la ciudad como museos, teatros, universidades, centros culturales y espacios públicos. Esto acerca el festival a las personas y les da la oportunidad de ver un cine al que no están acostumbrados.
Adicionalmente, Ambulante tiene eventos especiales y académicos. En Medellín, el director Tom Fassaert dictó un máster Class y presentó su documental A Family Affair .
El año pasado pude ver The Look of Silence y The Wolfpack, documentales que no llegaron a cartelera pero que fueron reconocidos por críticos y directores de cine. El primero merecía ganar el Óscar por Mejor Documental (estuvo nominado) y el segundo se llevó el Gran Premio del Jurado en Sundance. Este año, el festival siguió demostrando su fortaleza en la programación audiovisual con películas destacadas alrededor del mundo, algunas galardonadas en la versión más reciente del Festival de Cine de Sundance que aportaron a la selección de 2016 percepciones muy diversas sobre la actualidad.
Si bien la cantidad de proyecciones en cada ciudad no es demasiada, vale la pena conocer los horarios y las funciones porque es un cine difícil de encontrar en salas comerciales. En Medellín, los asistentes pudieron disfrutar de películas arriesgadas, cuya representación de la realidad se aleja de las convenciones: En Under the Sun deliberadamente vemos a los delegados de Corea del Norte manipular las escenas. En All These Sleepless Nights las reflexiones sobre el vacío de nuestra generación son tan estéticas que convierten algunos planos en complejas secuencias que parecen de una película de ficción (Enter the Void, por momentos). Y en Life Animated la animación es un recurso crucial para documentar la vida de un adulto que sufre de autismo.
La organización cumplió con puntualidad en los eventos y calidad en las proyecciones. Sin embargo, para poder disfrutar desde el principio todas las películas considero que los listados de asistencia, documentación o encuestas que deben diligenciar los espectadores merecen su espacio al final de las funciones.
Estos seis años como espectadora de eventos cinematográficos en Medellín y dos asistiendo a Ambulante me han llevado a pensar que en la ciudad es el evento que tiene la mejor programación cinematográfica.
La UPB Sede-Medellín lanzó este año la primera Maestría en Cine Documental de Colombia. Valdría la pena que estudiantes y docentes no perdieran de vista este festival que supera por mucho otros eventos de cine documental en la ciudad, y unos tantos de ficción.